La sombra del maguey: México e incompetencia

Si quieres que te traten como una reina –hasta en la peluquería- ve a México. Te abrirán la puerta del coche y te lo aparcarán. Se alegrarán por tus hijos y te felicitarán porque son güeros. Esperarás en un salón de altos techos, junto a un jardín regado de la lluvia tropical. Te llamarán hermosa.

Si quieres pasar una noche mágica con tu mujer en una antigua hacienda colonial, entre sábanas cosidas a mano, cenar chile en nogada con música de marimba y explicaciones del mesero sobre volcanes, la eterna primavera de Atlixco o la fundación de Puebla como ciudad piloto en 1531 -¡todo por 90 euros!-, lo puedes encontrar en México (http://www.casareyna.com/).

Y si se te pincha una rueda o se te acaba la batería frente a tu casa, mejor que estés en México. Porque tendrás cerca un chofer o un vigilante que te sacará del apuro con una sonrisa y una propinita. Se sabe que estás en México porque encuentras personas alrededor dispuestas a ayudarte.

Pero no te recomiendo México si tienes un concepto suízo del tiempo, piensas que media hora debe durar treinta minutos, que “ahorita mismo” significa hacerlo inmediatamente; si no soportas que se atasque la cisterna del baño del hotel –aunque la acaben de revisar- que se atranquen las puertas, o que amablemente te preparen una sala de proyección con pantalla pero sin cañón.

Reina una distinta concepción del tiempo y del trabajo: aquí se está. Es otro sentido de la eficacia y el ritmo: los asuntos deben seguir su proceso. Nada puede ser de hoy para mañana. Hay siempre abiertas distintas posibilidades, y las normas se adaptan a las personas cuando es preciso.

El mexicano ve pasar al histérico europeo como las reses miran al tren: con serenidad y una sonrisa ladeada. Con la sensación de que toda revuelta nos deja en el punto exacto en que ya nos hallábamos. Aquí encontramos una gran lección: ¿es preciso ser tan preciso?, ¿vale la pena pasarse la vida calculando, en lugar de cantando?

Nadie como el propio Carlos Fuentes ha recogido esta paradoja, que es México, en su monumental novela La región más transparente: “no ha habido héroe con éxito en México. La derrota de México nos conduce a la verdad, al valor. Lo que tiene éxito no siempre es lo valioso. No es posible identificar el éxito con el bien y el fracaso con el mal, pues entonces los Estados Unidos serían buenos y México malo. No interesa ser bueno o malo, sino importar humanamente: es decir, ser odiado o amado con intensidad. Vale la fuerza e intención del sentimiento, no los resultados prácticos. Todo lo mexicano es, sentimentalmente excelente, aunque prácticamente inútil”. A la sombra del maguei.

18 comentarios en “La sombra del maguey: México e incompetencia”

  1. gabriel,

    Después de un mes en México ….interesante artículo.
    Desde mi punto de vista, hay que aprender a vivir más tranquilos y a disfrutar de la vida, ahora bien buscando el trabajo bien hecho, cumpliendo con la palabra dada y haciendo las cosas que hay que hacer bien.

    Lo que no hay que hacer es ser resultadistas, es decir, buscar el resultado por encima de cualquier cosa y justificar el fin justifica los medios

  2. Me ha encantado 😉

    La comparación de las reses es de lo mejor, pero la cita de Carlos Fuentes directamente insuperable (tan profunda, como aleccionadora).

    Pasé algo más de un mes en Centroamérica y hay muchos aspectos comunes. Incluso diría, sin haber tenido ocasión que la India se parece bastante al fresco que propones.

  3. Querido Gabriel, me alegra verte tan alegre y positivo, disfrutando de México, un país en el que siempre me he sentido (cuando he tenido la oportunidad de visitarlo, siempre por razones profesionales) como en casa. ¡Y no es tan distinto en muchos aspectos de nuestra España!
    También he sentido una cierta desazón porque me ha parecido que el país no se acaba de librar de ciertas lacras, de todos conocidas, empezando por la apropiación del poder político por parte de unas élites corruptas y despiadadas.
    ¡Viva México!

    (Aprovecho para confirmarte que tu libro GESTION DE INCOMPETENTES está ya a punto para imprimirse. Te mandaré un mail para acabar de concretar la tirada inicial).

  4. «Érase una vez 4 personas llamadas : TODOS, ALGUIEN, CUALQUIERA Y NADIE.

    Había un importante trabajo que hacer y TODOS estaban seguros de que ALGUIEN lo realizaría. CUALQUIERA podría haberlo hecho, pero NADIE lo hizo. ALGUIEN se enfadó por eso, ya que era un trabajo de TODOS. TODOS pensaron que CUALQUIERA podría haberlo hecho, pero NADIE se dio cuenta de que TODOS dejaron de hacerlo. Finalmente, TODOS echaron la culpa a ALGUIEN, cuando NADIE hizo lo que CUALQUIERA podría haber hecho».

    1. Ehem…disculpa mi comentario, pero.. qué quieres decir exactamente con eso, más allá del chascarrillo prefabricado, y que relación tiene con lo que expone el autor?
      Saludos

  5. Querido Gabriel, bienvenido a casa. Me ha encantado tu relato. Me has evocado mis viajes a ese país y otros más al sur, aquel cliente que decía con ese rintintín…»ellos hacen como que trabajan y nosotros como que les pagamos», pero sobre todo he recordado a tres directivos «tontos del remate» que llevaban el peso del mundo en sus espaldas, que boquiabiertos veían como unos niños descalzos, que vendían un caramelo en un semáforo, sonreían, jugaban, disfrutaban el momento…
    Qué es lo que no cuesta tanto interiorizar?

  6. Apreciado Gabriel:

    Para mí tu reflexión tiene dos aspectos, uno que comparto en su mayoría respecto a la amabilidad mexicana, que he podido comprobar en los diversos viajes que he podido hacer y la ineficacia.
    Pero el Mexico del que hablas es uno el de los ricos.
    La carta podia haber empezado así (perdona que sea un poco provocador)

    Si quieres que tu esposa le peguen un tiro a la cabeza ves a Ciudad Juarez (Mexico), si quieres ves una policía honesta, incorruptible que hacen una mordida agradable ves a México, si quieres unos carteles de droga amables y unas bandas latinas que organizan actividades culturales ves a México, si quieres ir en taxi seguro ves a Mexico, si quieres vivir emociones fuertes como un secuestro expres ves a Mexico, si quieres ver barrios indigenas en una lucha contra el hambre ves a Mexico….

    Un abrazo y Viva Mexico

    Xavier Gil

  7. Seguro que sí, seguro que existe, tiene que existir un lugar intermedio, no? Entre el «ahorita mismo», la «media hora alargada» que puede llegar a mas de cuatro horas o la propia «mordida» obligada de México, frente a la inflexibilidad Alemana, ¡que verano por favor!, el coche se aparca siempre en el sentido de la circulación, incluso en el patio de casa, los «zapatos fuera» dentro de casa y rigurosamente colocados en paralelo, o quedar a cenar a las 19:00 son las 19:00, no las 19:02 o intentar pedir «más o menos medio quilo» de queso en la tienda, o quieres medio quilo o quieres 490 gr, no es lo mismo, entiendes!, no es lo mismo. Seguro que existe. Será España?

  8. Gabi, me resulta agradable observar, como trazas de una manera alegre y desenfadada, tus aseveraciones sobre México: ¡Tierra de pasión! Con todo lo que ello comporta. “El corazón tiene razones, que la razón no entiende, no comprende, y le resulta duro de aceptar” (adaptación de Blas Pascal).

    Ya se ve, que dejamos lo «mejor» de nosotros por esas tierras (en todos los sentidos), y que el reloj –tras su independencia–, parece haberse detenido siglos atrás, en según que cosas. Su escala de valores y prioridades vitales, no parecen ser las nuestras… en según que territorios de la piel del “toro” (por tu acertado símil vacuno).

    No trato de juzgarlos, al igual que tú, con tu comparación con sus vecinos del piso de arriba. México es lo que es, al igual que el resto de países de Latinoamérica, que tan bien conoces. Con sus misterios, cultura, sensación de inacción y fluir del kronos, bajo nuestro punto de vista.

    Lo que realmente me apena, es que desde hace ya tiempo nos intercambiemos más nuestros culebrones televisivos e ideologías políticas nefastas, que la fuerza intelectual y empresarial –como antaño–, que sin duda existe en ambos países. El suyo y el nuestro. Nos mimetizan en lo vulgar… y nosotros ansiamos, su pasión y gozo por la vida, mal superados. Queda claro que el Carpe Diem, lo vive cada cual, como Dios le da a entender. Nuestro progreso, parece dejar en entredicho el suyo, a primera vista. Pero no deja de ser una visión un tanto distorsionada: ¡Que viva México! 🙂

  9. Cuando has trabajado con mexicanos sabes de lo que estás hablando. Yo pensaba que en españa nos lo tomamos con calma, llegamos tarde, café a media mañana, 2hs para comer incluyendo siesta, salimos a las tantas del curro para compensar el tiempo perdido… Pero después de trabajar con mexicanos te das cuenta de que ellos sí se lo toman con calma… eso sí, te alegran el día, te sonrien y buena onda ante todo!

  10. Estimado Gabriel,
    Me ha resultado grato el leer tu relato de la experiencia Mexicana, así como los comentarios de los amigos.
    He de decir que comparto varias cosas de varios puntos de vista.
    Siendo yo, como dice la familia, Mexicano de hecho y Español de pecho, habiendo nacido aquí en México pero crecido en una cuna y bajo una cultura completamente distinta, en una casa de mezcla Catalo-Asturiana, disfruto mas las mungetas amb butifarras que los chiles en nogada pero siempre un buen tequila sienta bien (o una sidrina).
    Ahora bien, es cierto que en México impera aun una fuerte corriente política devastadora, que reina con una élite fundada en los inicios del S.XX por Plutarco Elias Calles con base a las ideologías del Indú Marabentrha Rat Noi (de ahí tal vez la similitud con India que alguien notaba) y si bien esta forma de gobernar se ha hecho cultura y han generado muchas de las problemáticas actuales, como son la corrupción, el narcotráfico, el crimen organizado, etc., hoy podemos ver un México «despertando».
    En México existe mas de un México. Hay un México sonriente, servicial y amable en cada esquina. Estamos habituados al servicio, a la amabilidad, al «por favor/gracias» y al «estamos para servirle», sin embargo hay un México lleno de pobreza, de inseguridad y de ignorancia; un México sumido en el abuso.
    Pero también hay un México comprometido con México que empieza a despertar y empieza a pensar en el Mexicano antes que en otra cosa. Un México cansado de la podredumbre en la que la esfera política nos ha sumido.
    Este México que, no solo es de empresarios exitosos, sino de simples y comunes mortales que se van dando cuenta de que hay que hacer cambios radicales. Prueba de ello fueron las elecciones locales del Estado de Puebla en donde la gente salio a votar para sacar a Mário Marín y sus allegados del gobierno, que le costaron al Estado mas de 1.2 Millones de pobres y una deuda superior a la del Plan Marshall.
    Creo que México es un país sumamente complejo en el cual, como diría Miralles en su «Hernán Cortes, inventor de México», habría que empezar por definir «que es un Mexicano».
    Al final del día a México hay que vivirle, no visitarle; cuestionarle y entenderle; aquí las vacas que miran al tren han entendido que el valor esta en el ser y no en el poseer, aunque han perdido de vista el comprometer y responder. México, con todos sus problemas, es esperanza, es promesa, es «por favor» y estamos para servirle, a la sombra de un maguey.

  11. Me han gustado mucho vuestros comentarios profundos y agradecidos. A mí cada vez me viene más a la cabeza una frase evangélica, especialmente apropiada para estas fechas: «al final de la jornada aquél que se salva sabe, y el que no, no sabe nada». Me quedé impactado por la familia que vi recogiendo leña cerca de San Juan del Río. Vi un sentido de la identidad superior al que mostraban los carteles gigantes de LadyGaga sin ropa en las colas de Insurgentes en el DF. No sé si se ve mi reflexión, dedicaré quizá otro post al tema.

    J.Maple: buenísima tu secuencia. También da para un post. Te la tomo prestada.
    Joan B: la cita de Pascal capta el profundo de mi posición.
    Jaume: sí pienso que el mundo latino podría ser una síntesis superadora. Quizá una Catalunya independiente podría ayudar.
    Diego: España no cumple el tópico. Tenemos el dudoso honor de encabezar el ranking mundial de estrés, después de Corea del Sur. Aunque compensamos pocos días de trabajo con mucho trabajo esos días: peligroso equilibrio.
    Xavier: tu último párrafo es tan cierto como descorazonador. México ha cambiado mucho en estos últimos años, y no está claro que sea para bien. Al final Octavio Paz tendrá más razón que nadie. Pobre México tan lejos de Dios y tan cerca de los Estados Unidos. Podemos reequilibrar esta tesis?
    Gracias a todos de nuevo.

  12. Hola Gabriel,
    recién incorporado al trabajo, me alegra ver que tu estancia en México te ha servido, entre otras muchas cosas, para deleitarnos con un texto lleno de reflexiones.

    Nunca he estado en México pero he tenido familia viviendo en D.F., tengo varios amigos mexicanos, una cuñada chilena y viví un mes en Chile, así que algo conozco.

    En mi opinión, como decía Javier Gil, el México que describes al principio es exclusivo para unos cuantos. Desgraciadamente en esta vida si tienes dinero te abren la puerta del coche, te llaman hermosa y te tiran petalos de rosa a tu paso en la mayoría de los paises del mundo. Me gustaría ver si un «vamp» sucio y andrajoso recibiría el mismo trato llegando a dicha peluquería.
    En cualquier caso no creo que tu objetivo fuera decir lo bien que se vive en México cuando tienes dinero, a no ser que sufras el sindrome que yo llamo: «Sindrome de las tres tiendas».
    Es esa sensación que experimentas cuando estás de viaje de placer o de vacaciones, y de pronto llegas a un lugar donde todo es perfecto y piensas que allí serías el hombre más feliz del mundo, sin problemas y sin sufrimientos y entonces dices: «Señor, ¿por qué no montamos tres tiendas y nos quedamos aquí?.
    Al menos los apostoles si tenían razones para decirlo, pero nosotros sabemos que al final la felicidad y la alegría no vienen por el lugar donde estés si no por como estás interiormente.
    Y aquí llegamos a donde nos querías llevar, a la reflexión interior. México y su forma de ser, ¿por qué nos llama tanto la atención su manera de gestionar el tiempo?, ¿es acaso la suya, mejor o peor que la nuestra?, ¿o simplemente es diferente?. Como dice un primo mio: «Creo que el tiempo que se ha vivido bien es ganancia, y sus huellas, riqueza.»
    Me gusta lo de «que se ha vivido bien, ni más deprisa ni más despacio». Dejemos que el tiempo sea tiempo.

    Un abrazo Gabriel,
    Javier

  13. Es verdad, en Mexico hay mas de un Mexico. Sin embargo, creo que la pasion por la vida, el vivir en el presente y el saber amar se da en los pobres y en los ricos.
    Llevo muchos anyos viviendo en Estados Unidos. Conozco gente maravillosa y buena pero, al final, cada uno vive para si mismo, estresado pero sin saber porque. Cuando estoy en Mexico, lo veo diferente. Quiza no es mejor ni peor, pero es definitivamente, diferente.
    Y mis hijos, que tengo muchos y que son cien por cien «gringos», lo van descubriendo poco a poco, sin que yo les diga nada. El de 13 anyos me decia: En Mexico siento que puedo ser yo, y que a la gente le importo yo.
    En mi opinion, tambien el pobre de Mexico sabe «perder» el tiempo con sus amigos y disfrutar la vida (en la medidad de sus posibilidades) y quiza esto sea, precisamente, una pequenya causa de el porque lo siguen siendo.

    Una abrasada
    Montse

  14. jajajajajajaja esta análisis es directamente proporcional a la ya gran frase que siempre nos recuerdan los otros europeos «Spain is different»!!

  15. Yo soy criollo y es muy aterrador mirar tanto la parte espanola como la indigena mezcladas en el caracter del mexicano. Aterrador, porque las peores conductas de ambos pueblos se conjuntaron en este espacio geografico y estamos arrastrando las consecuencias en todos los ordenes sociales. Entre mas conocemos los modos de produccion de los paises desarrollados, mas nos damos cuenta de la distancia que media entre nuestra ideologia y la de ellos. Nuestros vicios (lo que para algunos es folclor), pesan mas que nuestras virtudes. Pero, yo puedo decirles, sin temor a equivocarme, que lo peor del mexicano es que NO SE TOMA EN SERIO.
    Luis Marquez (Historiador y Psicologo Organizacional).

    1. Me recuerda esa famosa anécdota de Shaw de que en una cena de celebridades le dice una supormodelo al premio Nobel, deberíamos casarnos porque con mi belleza y su inteligencia. A lo que él replica. No, porque si es con mi belleza y tu inteligencia, estamos arreglados.
      Estoy seguro que cada espíritu del pueblo debe saber encontrar su inspiración. A veces nos dejamos arrastrar en exceso por el paradigma de otras naciones más poderosas. A ver si pronto recalo en México y tratamos de arreglar un poco esto. Gracias por tu comentario.

      1. Gracias por tu respuesta. México espera un nuevo gobierno. Vamos a necesitar muchísima ayuda para levantar cabeza. ¿Te gustaría participar? Saludos, Prof. Luis Márquez

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